CIBERCULTURA JUDICIAL
Por Darwin Muñoz*, dcmunozn@gmail.com
El impacto de las tecnologías
de la Información
y la comunicación (TIC) en la sociedad es extraordinario. Las mismas ofrecen un sinfín de posibilidades para
provecho de la humanidad. De igual manera, son innegables los beneficios que se
han recibido y se reciben de éstas.
Lo afirmado anteriormente, queda claramente demostrado
en las diferente ramas científicas de la sociedad, donde ahora sería impensable
una aplicación y desarrollo apropiado de las mismas sin la ayuda de los avances
informáticos.
En el ámbito judicial, las TIC
han creado una nueva cultura que ha llevado a jueces, fiscales, abogados y
usuarios a insertarse de manera decidida en este nuevo mundo de posibilidades.
Ésta nueva cultura la hemos denominado Cibercultura judicial y al hacerlo nos referimos a esa cultura que se ha creado como
consecuencia del uso y aplicación de las TIC en la Justicia y el lugar que
la misma ocupan en el Ciberespacio.
Hoy podemos disfrutar, en la justicia,
de una serie de beneficios y ventajas que sin las TIC era imposible imaginar.
Notificaciones electrónicas, asesoría legal vía web, control y seguimiento de
casos y hasta juicios virtuales son las novedades de esta nueva cultura en la Web. A todo esto, se agrega
la cantidad de dispositivos que cada día se insertan como medios que facilitan
el acceso a la justicia, haciendo cada vez más cercano la ubicuidad de las
tecnologías en la vida del ser humano y por lo tanto en todas y cada una de las
áreas en que se desempeña.
Estamos conscientes que todavía
es necesario seguir fortaleciendo el uso de las TIC en el sector justicia, es
necesaria mayor inversión económica, personal mejor capacitado, un cambio de
cultura. En resumen, es necesario crear una verdadera Cibercultura judicial que
nos permita a todos disponer de una mejor justicia.
ABSTRACT
The impact of the Information Technology
and Communications (ICT) in society is extraordinary. They offer endless
possibilities for the benefit of mankind. Similarly, are undeniable benefits
that have been received and are receiving from them.
I stated before, clearly demonstrated
by the different branches of science in society, where it would be unthinkable
now an application and proper development of the same without the help of
computer progress.
In the judicial sphere, ICT has created a new culture that has led to judges,
prosecutors, lawyers and users inserted in a decisive way in this new world of
possibilities. This new culture we called Cibercultura
Judicial and in so doing we treated this culture that has been created as a
result of the use and application of ICT in the Justice and in the Cyberspace.
Today we can enjoy, justice, in a
series of benefits and advantages that without ICT was impossible to imagine.
Notifications electronic, legal advice by the Web, control and
____________
*Investigador Asociado del Centro Internacional de
Investigación en Alta Tecnología (CREA) del Instituto Tecnológica de las
Américas (www.itla.edu.do) y Estudiante Doctorado Sociedad de la Información y
el Conocimiento, Univ. Pontificia de Salamanca sede Madrid (www.upsam.com)
monitoring of cases, virtual trials,
all is part of this new culture on the Web. To all this, add the number of
devices that are inserted every day as a means to facilitate access to justice,
becoming increasingly close to the ubiquity of technology in human life and
therefore in each and every one of the areas in which they played.
We are aware that we still need to strengthen the use of ICT in the justice, we
need greater economic investment, better trained personnel, a change of
culture. In short, it is necessary to create a true Cibercultura Judicial that allows us all to have a better justice.
Cibercultura, Corte, Globalización, Judicial, Justicia,
Suprema Corte, Tribunales, Tecnologías, TIC.
Una de las consecuencias más impactante del desarrollo
de las TIC es el proceso de globalización que vive la humanidad. Definido
por la Real Academia
Española como la “Tendencia de los mercados y de las empresas a
extenderse, alcanzando una dimensión mundial que sobrepasa las fronteras
nacionales.”1
En tal sentido, organizaciones
como la Comisión
Económica para América Latina (CEPAL), centran su atención,
en el efecto determinante que las TIC han tenido en el proceso de globalización
que hoy está viviendo nuestro planeta. En efecto dice: “El mundo de hoy está
marcado por lo que se conoce como el proceso de globalización y aunque no se
trata de un proceso nuevo, los drásticos cambios en los espacios y tiempos
generados por la revolución de las comunicaciones y la información le han dado
nuevas dimensiones, que representan transformaciones cualitativas con respecto
al pasado”.2
Luego añade, “La globalización brinda, sin
duda, oportunidades para el desarrollo. Todos hemos entendido, con razón, que
las estrategias nacionales deben diseñarse hoy en función de las posibilidades
que ofrece y los requisitos que exige una mayor incorporación a la economía
mundial. Pero, al mismo tiempo, este proceso plantea riesgos originados en
nuevas fuentes de inestabilidad (tanto comercial como, especialmente,
financiera), riesgos de exclusión para aquellos países que no están
adecuadamente preparados para las fuertes demandas de competitividad propias del
mundo contemporáneo, y riesgos de acentuación de la heterogenidad estructural
entre sectores sociales y regiones dentro de los países que se integran, de
manera segmentada y marginal, a la economía mundial”.2
Thomas Friedman señala una serie de factores que han
contribuido a este proceso de Globalización o usando su propia terminología de Globalización
2.0. Él señala 10 factores “aplanadores”3, de los cuales podemos ver que por lo menos
cinco están relacionados directamente con las TIC.
El proceso de globalización supone nuevos desafío y
retos para la justicia que debe de trabajar para hacer de este un mundo más
seguro y confiable. Tal como nos dice Joseph E. Stiglitz “El bárbaro atentado
del 11 de septiembre ha declarado con toda nitidez que todos compartimos un
único planeta. Constituimos una comunidad global y como todas las comunidades
debemos cumplir una serie de reglas para convivir. Estas reglas deben ser –y deben
parecer- equitativas y justas, deben atender a los pobres y a los poderosos,
y reflejar un sentimiento básico de decencia y
justicia social”.4
El proceso de globalización tiene varias lecturas,
pero avanza de manera férrea e
indetenible. Trayendo consigo aspectos positivos y negativos. Tal como lo
señala el renombrado periodista Andrés Oppenheimer, en su libro Cuentos Chinos:
“La pobreza en el mundo- si bien continúa a niveles
intolerables- ha caído dramáticamente en los últimos años en todos lados. La
globalización lejos de aumentar el porcentaje de pobres en el mundo, ha ayudado
a reducirlo drásticamente: tan solo en los últimos 20 años el porcentaje de
gente que vive en extrema pobreza en todo el mundo-con menos de un dólar
diario- cayó de 40 a
21 por ciento. Y la pobreza genérica- el número de gente que vive con menos de
dos dólares por día- a nivel mundial ha caído también, aunque no tan
dramáticamente: pasó de 66 por ciento de la población mundial en 1981, a 52 por ciento en
2001. De manera que, en general, el mundo está avanzando, aunque no tan
rápidamente como mucho quisiéramos.”5
En su libro Cómo hacer que la Globalización
funcione, Joseph E. Stigliz presenta un balance interesante al decir “Algunos
problemas de la globalización son inevitables y tenemos que aprender a
afrontarlos: destacadas teorías económicas argumentan que la globalización
conducirá a una desigualdad cada vez mayor en los países desarrollados porque
los salarios, sobre todo de los trabajadores no cualificados, se reducirán.
Sigue diciendo, “Se puede resistir la tendencia a la
baja de los salarios, pero entonces aumentará el desempleo. Ni siquiera los
políticos más poderosos pueden revocar estas leyes de la economía, aunque lo
intenten. Pero pueden contribuir a que nuestras sociedades se adapten a esta
gran transformación de nuestra sociedad global, de igual modo que el
Estado-nación contribuyó a la transición hacia la industrialización hace mas de
in siglo.”6
Más adelante señala que “podemos tener economías y
sociedades más fuertes que den más importancia a valores como la cultura, el
medio ambiente y la vida misma.7
Dado que el tema de la Cibercultura8
es bastante amplio y puede ser enfocado desde diferentes ángulos y puntos de
vista, nos enfocaremos de manera especial en lo que hemos denominado
Cibercultura Judicial. La cual podríamos definir como la nueva cultura judicial
producida por el uso intensivo de las TIC en el sector justicia. Sabemos que
esta combinación de concepto es nueva, pero creemos tener los elementos
necesarios para utilizarla, tal como veremos más adelante.
El sector justicia9 no ha escapado al boom
tecnológico, sino que se ha insertado de manera vertiginosa en el mismo. Es
incuestionable el impacto que las TIC también han producido en este sector.
Lo interesante de esto es que su uso se incrementa día
a día para beneficio de la sociedad.
Como se ha afirmado “La dama ciega de la justicia ya
no anda solo con la espada y la balanza en sus manos. Ahora, quiéralo o no,
debe apoyarse en un teclado, en Internet y las redes de computadoras del
mundo.”10
Las tecnologías de la información y comunicación han
permitido ir dejando atrás la forma
artesanal y rudimentaria a la cual hemos estado impuestos a trabajar desde hace
décadas, dando como resultado el
surgimiento de comunidades virtuales y redes sociales en el ámbito de la
justicia.
Históricamente, desde que la
informática empezó a dar sus primeros pasos comerciales en la década de los 60
y 70 del siglo pasado, se empezaron a desarrollar soluciones informáticas
aplicadas al sector justicia, tomando forma lo que hoy se conoce como
informática jurídica.
En América Latina, desde
comienzo de los años 70 se empezó a hablar de Informática Jurídica, en boca de
personas como, Anselmo Martino, Antonio Millé y Fernando Jordan
Florez, entre otros.
Ya para los años 80 se empezó
a manejar difusamente el término y conceptos del derecho Informático y a
comienzos de los años 90 a
hacerse una realidad la presencia de la Informática en la Justicia, ya sea mediante
Sistemas de seguimiento de casos, también conocidos como “Tracking Systems”, de manejo de Jurisprudencia en sistemas
documentales, sistemas para el manejo de estadísticas, entre otros.
Muchos han sido los proyectos
financiados por la
Agencia Internacional de los Estados Unidos para el
Desarrollo (USAID), la
Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI), el
Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), entre otros, desde esas épocas a efectos de hacer posible
la introducción de cambios y reformas en la justicia de nuestros países
incluyendo, por supuesto, el uso de las TIC.
La vanguardia en el uso de las
TIC aplicadas a la justicia siempre ha estado de la mano con los países
desarrollados, como Estados Unidos, España, Alemania, Inglaterra, entre otros.
Hoy en día, la mayoría de los
países cuentan con algún grado de uso de las TIC, en el manejo y prestación del
servicio de Justicia a sus diferentes
sociedades y en el manejo administrativo del Poder Judicial.
En el documento base,
preparado por Alberto Binder, Cristian Riego y Juan Enrique Vargas,
del Centro de Estudios de la
Justicia de las Américas (CEJA), sobre el foro “El uso de información en las instituciones de justicia”, plantean que: “El enorme salto tecnológico que se ha dado en los últimos años en el
manejo y uso de los sistemas de información ha impactado de un modo inocultable los viejos modelos y ha generado nuevas expectativas
sobre la base de la información que debe tener una decisión para ser considerada como
razonable y justificada. Es decir, que nos hallamos ante una organización
necesariamente en transición donde el uso de la información deberá cumplir una
triple función: por una parte,
debe ayudar a esa transición, asumiendo que los procesos de toma de decisión
todavía no están normalizados y por lo tanto serán una mezcla de nuevas y
viejas formas. Pero de todos modos el sistema judicial debe seguir
funcionando y debe transformase sobre la marcha. En segundo lugar, los sistemas de
información deben acompañar y ayudar a moldear los nuevos procesos de toma de decisión que surjan de
los nuevos modelos organizacionales. En
tercer lugar, el sistema de información en sí mismo debe ser un instrumento, una herramienta que promueve la transformación
organizacional provocando una nueva exigencia de racionalidad, generando
nuevas expectativas y estableciendo patrones de calidad que no puedan ser
eludidos en el proceso de toma de decisión.”.
11
Es innegable que al día de hoy estamos asistiendo a
una de las transformaciones más profunda de la administración de justicia
gracias a las TIC.
Estoy seguro de que, si no todos, la
mayoría de los ciudadanos del mundo, estamos de acuerdo en que uno de los temas
más importantes en toda sociedad es el tema de la justicia. Sin un sistema de
justicia mínimamente confiable y equitativo es prácticamente imposible que un
estado pueda sobrevivir.
Recordemos a José Martí (Libertador de
Cuba), quien fue jurista y dijo que: «justicia tardía no es justicia» y estoy
seguro que en este punto las TIC hacen la diferencia de que la justicia esté
mejorando cada día en su administración casi en todas partes del mundo.
Cabe destacar en este punto lo dicho Erkki Liikanen: “Las tecnologías
de la información y la comunicación (TIC) pueden ayudar a los gobiernos a
enfrentarse a los numerosos retos que se le presentan. Sin embargo, no hay que
centrarse en las TIC, sino en la utilización de estas tecnologías junto con un
cambio organizativo y con nuevos métodos para mejorar los servicios públicos,
los procesos democráticos y las políticas públicas”.12
Hoy día contamos con
grandes y también pequeñas redes de datos,
múltiples sistemas de seguimientos de casos, con video conferencia que nos
permiten, si lo deseamos, realizar juicios virtuales, donde podemos tener el
reo en la cárcel y el testigo a miles de kilómetros, contamos con sistemas de face and iris recognition, huellas
dactilares, firma digital, documento electrónico, etc., en definitiva, desde el
punto de vista tecnológico, tenemos a nuestra disposición un gran menú
tecnológico para escoger lo que deseemos para incorporar al sector justicia.
Tal como afirmáramos en la introducción esta
combinación de términos es relativamente nueva. Cuando hablamos de Cibercultura
Judicial nos referimos a esa cultura que se ha creado como consecuencia del uso
y aplicación de las TIC en la
Justicia y especialmente en el Ciberespacio.
La justicia en el nuevo paradigma tecnológico ha
creado su propio espacio y desafíos. A pesar de que tradicionalmente la
inversión tecnológica en este campo no ha ido al mismo ritmo que otros, esta
tendencia ha ido cambiando en la última década y las inversiones son inmensas.
No hay lugar a dudas sobre lo certero de la afirmación
de Manuel Castells cuando nos concientiza del hecho que esta revolución nos
“remite a las tecnologías del procesamiento de la información y de la
comunicación y es, en lo esencial, la aplicación del conocimiento y la información
a aparatos de generación de conocimiento y procesamiento de la
información/comunicación en un círculo de retroalimentación acumulativo entre
la innovación y sus usos. Estas características se unen a la actividad creativa
de los usuarios que llegan a controlar la tecnología. 13
Un concepto muy importante, dado que fue de lo primero
que se empezó a usar de manera formal en la administración de justicia es la
denominada informática jurídica, la cual es definida como “la utilización de
los diferentes conceptos, categorías, métodos y técnicas propias de la
informática en el ámbito de lo jurídico. Se relaciona con la creación de flujo,
clasificación, sistematización y utilización de datos requeridos, en la
“producción” y/o en la administración de lo jurídico, así como en el estudio de
las implicaciones o efectos que esta utilización produce en el seno mismo del
derecho y por ende en la sociedad.”14
Tal como afirma el
Dr. Fernando Jordan, en su libro, Las Nuevas Tecnologías, el Derecho y la Justicia “La función del
Derecho consiste en adecuarse a las nuevas necesidades de la sociedad, para
establecer continuamente, las nuevas reglas de convivencia, los procedimientos
y los sistemas de control y coerción, de organización y de convivencia, en un
mundo globalizado y cambiante”.15
En efecto, todo está han roto paradigmas tan arraigados como el del
tiempo y del espacio, en la medida que hemos logrado muchos desarrollos que
transforman la percepción sicológica de esas categorías o conceptos, en la
medida en que nos permiten trabajar en tiempo real a velocidades imperceptibles
para el sentido humano, dando la sensación que tanto el tiempo como el espacio
tienden a cero. Podemos mencionar cientos de ejemplos de casos como estos, pero
creo que uno de los más evidentes es el de Google con sus robustos algoritmos
de búsquedas.
Nos transportamos por el ciberespacio, hacemos ejercicios de búsqueda y
agrupamiento, de extracción y de retorno de lo encontrando sin apenas darnos
cuenta que lo hemos hecho. No hay
desplazamiento, no hay el concepto de espacio ni el de tiempo, en la
medida en que ellos son prácticamente imperceptibles, a nuestros
sentidos.
Las
nuevas tecnologías han permitido que se esté gestando un nuevo derecho, que tiene
como uno de sus objetos del conocimiento más relevantes para la Nueva sociedad: a las TIC, a
los servicios y a los derechos ciudadanos.
Quiérase o no, hoy, todas las conductas humanas,
hechos, actos u operaciones que en su diario devenir se produzcan, pueden
enmarcarse por vía de la imagen, el sonido, o el dato, en un mundo
eminentemente virtual. Esto
ha llegado a tales niveles que dice Peter Steiner, en su libro, Un perro a otro
en una viñeta, “En Internet nadie sabe que eres un perro”.16
Definitivamente que el uso de las Tecnologías de la Información y
Comunicación han revolucionado el sector justicia. Nunca antes se pensó que
podíamos llegar tan lejos en la mejora y optimización de los procesos
judiciales. Cada año en el mundo se invierten miles de millones de dólares en
la implantación de tecnologías aplicadas a la justicia.
Una muestra de la extraordinaria importancia que
tienen las TIC para el sector justicia lo constituye el The
Global Information Technology Report auspiciado por el World Economic Forum, donde se dedican varios apartados para medir
el impacto de las TIC en este sector.
En tal sentido, los
responsables de dicho informe para el 2007, Soumitra Dutta E Irene Mia,
introducen su informe diciendo que “The
pace of technological innovation throughout the global community is relentlessly
pushing forward. Ray
Kurzweil, the American futurist, has observed that “In the nineteenth century,
we saw more technological change than in the nine centuries preceding it. Then
in the first twenty years of the twentieth century, we saw more advancement
than in all of the nineteenth century. Now, paradigm shifts occur in only a few
years time. . . . So wewon’t experience 100 years of progress in the 21st
century —it will be more like 20,000 years of progress (at today’s rate).”17
Otra referencia importante es
el Court Technology Conference,
considerado el evento más importante del mundo donde se exponen las principales
tecnologías aplicadas a la justicia.18
Definitivamente la justicia no
es la misma desde que se han incorporado las TIC en su uso. Actualmente los
paradigmas judiciales han ido cambiando y adaptándose a esta nueva realidad.
Hoy contamos con terminologías
propias como la e-justicia, definida
como la justicia en la
Sociedad del Conocimiento. Donde podemos englobar una
extraordinaria cantidad de soluciones tecnológicas usadas en el ámbito judicial,
desde una simple agenda electrónica hasta complejos sistemas de gestión y
control de informaciones judiciales.
La e-justicia pretende abarcar
y manejar de manera integral todo el tema de las TIC aplicadas a la justicia en
el Ciberespacio.
6. PRINCIPALES TIC USADAS EN LA CIBERCULTURA JUDICIAL
A continuación mencionaremos las principales Tecnologías
de Información y Comunicación que se utilizan en el sector justicia, de tal
manera que podamos tener una idea de la importancia de las TIC en dicho sector
y cómo éstas son las bases de la Cibercultura Judicial
que se ha creado. Los casos que deseamos señalar brevemente son los siguientes:
- Comunidades Virtuales y redes sociales de temas
judiciales: Estos son espacios
virtuales que se han creado para todo tipo de intercambio a través del
Ciberespacio.
- Realidad Virtual: A través de la realidad virtual es posible conocer otras
“realidades” a través del Ciberespacio sin
necesidad de desplazarse. Existen diferentes tecnologías de
realidad virtual, pero todas procurar proveer un sentido de interactividad
como si fuera de forma presencial. En el ámbito judicial podemos ver
varios ejemplos, entre ellos recorridos virtuales, solicitud de servicios,
entre otros.
- Chat: Esta herramienta permite mantener un contacto en línea con otras
personas para intercambio de voz, datos y videos. Ha experimentado
importantes mejorías a través de la incorporación de soluciones
tecnológicas de vanguardia.
- Agenda electrónica: La cual permite a los actores estar sincronizados con un punto de
consulta único para conocer los casos sin tener que desplazarse.
- Sistemas para la administración
de recursos financieros y humanos: Estos
sistemas están orientados a permitir un mejor control y seguimiento a los
recursos que gestiona la justicia.
- Seguimiento de casos
(litigación a través de Internet, expediente virtual, desformalización de
notificaciones, indicadores de tramitación). Estas
soluciones han permito brindar un mejor servicio a los usuarios del
sistema de justicia al permitir una mejor gestión de sus expedientes.
- Capacitación vía e-learning: Este
es un elemento que ha permitido ayudar de manera importante en la
formación de los actores del sistema de justicia.
- Coordinación e intercambio de
información de grandes bases de datos entre distintos países para mejorar
la eficacia en la persecución del delito. Las
TIC han resultado ser un aliado estratégico para combatir la delincuencia
y el delito en todos los órdenes y manifestaciones.
- Firma Digital: Esta es una de las tecnologías que mayor uso y beneficio está ofreciendo
en los últimos años. La firma digital es un conjunto de datos electrónicos
que identifican a una persona en concreto. Puede unirse a un documento
enviado por medio telemático, como si de una firma tradicional se tratara,
para que el receptor esté seguro de la identidad del emisor.
- Acceso Electrónico a servicios públicos: La tendencia a en este sentido es que los
ciudadanos reciban cada vez mejor y mayor servicio y de esa manera mejorar
el acceso a la justicia, a través de la llamada Administración Electrónica
o Administración Inteligente.
- Sistemas de Gestión Judicial o los famosos Tracking System: Han venido a ser el corazón de las cortes y/o tribunales. Son
sistemas que gestionan todo el trámite procesal de un expediente.
En adición, podemos mencionar otras tecnologías y
sistemas como son: tecnologías
biométricas, iris and face reconigtion,
grandes bases de datos especializadas, correos electrónicos, GPS, sistemas de
videoconferencia, datawarehouse, sistemas documentales, CRM, identificación por
radio frecuencia (RFID), etc.
Como hemos podido mostrar la cantidad de soluciones
tecnológicas dedicadas exclusivamente a este sector es enorme, a tal punto que
no debemos tener duda de señalar que estamos ante una verdadera Cibercultura
Judicial.
Los beneficios son incuestionables, cada día millones
de ciudadanos en todo el mundo se benefician de una mejor justicia gracias a
las TIC. A modo de ejemplo podemos señalar los casos siguientes:
1.
Declaración de
la renta por Internet.
2.
Mejor servicio
al ciudadano a través de informaciones virtuales en línea.
3.
Seguimiento de
noticias judiciales, ej. Juicios, fallos, reenvíos, etc.
4.
Notificaciones electrónicas.
5.
Práctica de interrogatorios
y declaraciones a través de "videoconferencia".
6.
Consultoría y/o asesoría
virtual.
7.
Solicitud de servicios, como
son las certificaciones.
Antes de mencionar las recomendaciones deseo hacer las
observaciones siguientes:
- La responsabilidad, ante un mundo globalizado, de
los que están llamados a administrar justicia es cada día mayor y
compleja.
- Las TIC son una realidad insoslayable para
nosotros lograr eficiencia en cualquier área del saber humano. La justicia
no escapa a la misma.
- Los recursos para incorporar las TIC a la
administración de justicia son muy escasos para las necesidades de los
pueblos, en especial los llamados info-pobres1.
- Sin las TIC es
prácticamente imposible lograr la eficiencia demandada en la
administración de justicia.
Vista la importancia y los beneficios de las TIC,
además del papel que la misma está llamada a jugar en la efectividad de nuestra
justicia, queremos hacer las recomendaciones siguientes:
- Aunar
esfuerzos que nos permitan
optimizar los recursos que se invierten en este tema. De manera especial,
debemos ver como las inversiones realizadas por organismos de cooperación
o de financiamiento en los países de menor desarrollo logren un mejor
resultado, optimizando los recursos escasos invertidos.
- Realizar
inversiones que nos permitan sacar
el mayor provecho posible a las tecnologías disponibles hoy día.
- Desarrollar
política coherente de uso,
desarrollo y aplicación de las TIC.
- Fomentar
el espíritu de cooperación
entre los diferentes países del mundo.
Hemos tratado de mostrar los elementos más
representativos de lo que hemos denominado “Cibercultura Judicial”. Reconozco que la
combinación de estos dos términos es algo nuevo, pero creo que parte importante
de este proceso de investigación es poder aportar ideas nuevas que puedan luego
ser profundizadas y/o ampliadas a futuro.
El tema de las TIC es un tema que apasiona, pero
combinado con un sector como el de la Justicia apasiona doblemente. Estamos conscientes
de que justicia es más que usar de manera eficiente las TIC, tal como lo afirma
el Juez Presidente de la
Suprema Corte de Justicia de la República Dominicana,
Jorge Subero Isa, quien expresó, en su discurso del 7 de enero del 2001, con motivo
del día del Poder Judicial, lo siguiente: “La capacitación y el aprovechamiento
de los recursos tecnológicos, por un lado, y por el otro, la reforma de nuestro
arcaico ordenamiento jurídico, debe producir la sinergia necesaria que conduzca
a una verdadera catarsis a fin de lograr la ansiada justicia pronta, oportuna,
garantista y eficaz”. 19
De nada nos sirve tener las mejoras tecnologías aplicadas
a la justicia si éstas no nos ayudan a brindar un mejor y efectivo servicio a
nuestros ciudadanos.
Estamos ante un nuevo orden mundial, el cual ha traído como
consecuencia lo que muchos llaman el derecho postmoderno, pero ambas realidades
junto a las TIC son estructuralmente partes de un solo componente social, que
no tiene ni lugar ni limite y que nos deben llevar a buscar la paz, la
seguridad y en especial a una mejor justicia que vele por un verdadero respeto
a la condición humana.
Abracemos, cual nuestra mejor compañera, a las TIC y
démosles a nuestros ciudadanos una
verdadera justicia. Todo esto debe fomentar y fortalecer la Cibercultura Judicial
y por lo tanto mayor beneficio para los ciudadanos del mundo.
Termino citando a Manuel Castell donde exclama en uno
de sus últimos artículos “Los Mitos de Internet”, lo siguiente: “Bienvenidos al
mundo que ya es el nuestro, bienvenidos a la cultura de la virtualidad real”.20
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Enlaces de interés relacionados con el tema de la justicia:
- http://www.ejusticia.org:
La justicia en la sociedad del conocimiento.
- http://www.uncjin.org/index.html: Red de Información de Justicia de las Naciones
Unidas. El
sitio contiene información judicial como estadísticas, documentos,
legislación, enlaces, etc.
- http://www.cejamericas.org: Centro
de Estudios de la
Justicia de las Américas. Aquí se podrán encontrar
interesantes estudios sobre el estado actual de la justicia en el mundo.
- http://www.iberius.org:
Red Iberoamericana de Documentación e Información Judicial.
- http://www.cumbrejudicial.org:
Cumbre
Judicial Iberoamericana.
- http://europa.eu.int/cj/es/index.htm:
El Tribunal de Justicia de las
Comunidades Europeas. Compendio de información sobre las actividades, funciones y
publicaciones del tribunal europeo sito en Luxemburgo.
- http://www.oas.org/SP/PROG/pa33s.htm:
Corte Interamericana de
Derechos Humanos. Es una institución judicial autónoma de la OEA, cuyo objetivo es la
interpretación y aplicación de la Convención Americana
sobre Derechos Humanos.
- http://www.usdoj.gov/:
Departamento
de Justicia de los Estados Unidos. Contiene el organigrama de este departamento,
así como también sus actividades legales, plan estratégico, comunicados de
prensa, plazas laborales, publicaciones y documentos, listado de
fugitivos, y vínculos a otros sitios gubernamentales de dicha nación.
- http://www.uscourts.gov/:
Judicatura
Federal de los Estados Unidos. Amplia fuente de datos sobre judicatura
norteamericana, tratando entre otros temas; la Constitución de
los E.U.A., estadísticas sobre negocios judiciales, oportunidades de
empleo en la judicatura, explicación sobre estructura y funcionamiento de
las Cortes Federales, publicaciones y directorios.
- http://www.ris.bka.gv.at/: Sistema de Información Legal de Austria. Es un sistema de información sobre derecho austríaco asistido por
computador, está coordinado y operado por la Cancillería Federal
Austríaca.
- http://www.justice.gouv.fr/:
Ministerio de
Justicia de Francia. Desarrolla el tema del Ministerio de justicia y
su biografía, el gabinete del ministerio de justicia, la justicia en
Francia, los textos fundamentales, Constitución francesa.
Información disponible en inglés, francés y español.
- http://www.conseil-constitutionnel.fr/: Tribunal Constitucional Francés. Ofrece una introducción a lo que es el
Concilio, los miembros, artículos de la Constitución,
leyes, decisiones de la Corte. Información disponible en francés,
italiano y alemán.
14. http://www.fiu.edu/~caj/index2.htm:
Centro para la Administración
de Justicia.
Establecido en 1984,
constituye una unidad académica de College of Urban and Public Affairs (CUPA)
de la
Universidad Internacional de la Florida (FIU). Su objetivo
fundamental de actividades es apoyar los esfuerzos de los países en desarrollo,
orientados a promover y fortalecer sistemas de justicia accesibles,
independientes, justos y eficientes.
16. http://www.finjus.org.do/: FINJUS es una organización sin fines de
lucro basada en Santo Domingo, República Dominicana. Su misión básica es
fomentar y promover actividades intelectuales en el campo de las ciencias
jurídicas y realizar todos los esfuerzos necesarios para contribuir a la
independencia y eficiencia del poder judicial en la República Dominicana.
- http://www.courttv.com/:
Court TV Online. Trae reseñas de casos que se están ventilando en
las distintas cortes de los Estados Unidos, con fotografías, entrevistas,
reportajes, videos y hasta transcripciones de documentos concernientes al
proceso. Contenido
actualizado diariamente.
- http://www.alfa-redi.org: Revista de derecho informático.
NOTAS:
1 http://buscon.rae.es/draeI/SrvltConsulta?TIPO_BUS=3&LEMA=globalización
[consultado 15 febrero 2008].
2 CEPAL, Globalización y Desarrollo, Informe 2002, pp 13.
3 Friedman, Thomas, La
Tierra es Plana, Madrid, Ediciones Martínez Roca, 2006, pp.
57-172.
4 Stiglitz, Joseph E., El malestar de la Globalización,
Tauros, Santillana Ediciones generales, México, 2002, pag. 17.
5 Oppenheimer, Andrés, Cuentos Chinos, Random House Mondadori, S.A de
C.V., México, 2005, página 18.
6 Stiglitz, Joseph E., Cómo hacer que la
Globalización funcione, Tauros, Santillana Ediciones
generales, México, 2006. pag. 51.
7 Ibid,
página 52.
8 Definida como la cultura en el Ciberespacio, Dr.
Luís Rodríguez Baena, marzo 2007, UPSAM, Madrid.
9 Según la Real Academia
Española, Justicia es “Una de las cuatro virtudes cardinales, que inclina a
dar a cada uno lo que le corresponde o pertenece.”
13 Castells, Manuel, La era de la información:
economía, sociedad y cultura, vol. 1, La sociedad Red, Alianza
Madrid, 1996, pp. 57-58
14 Jordan Florez, Fernando, La informática
jurídica, Universidad piloto de Colombia, Bogotá, 2da. Edición, 1988. PP. 49.
15 Jordan Florez, Fernando, Las Nuevas
Tecnologías, el Derecho y la
Justicia, Servigraphic, LTDA, Colombia, 2000. Página 21.
16 Citado por Friedman,
Thomas, La Tierra
es Plana, Madrid, Ediciones Martínez Roca, 2006, pag.457.
